El servicio cuenta con una unidad de cuidados intensivos con instalaciones y equipamientos especializados que le permiten a nuestro equipo de profesionales proporcionar supervisión constante y monitoreo de cuidados críticos para los pacientes hospitalizados. Las tecnologías de monitoreo y diagnóstico están disponibles en todo momento e incluyen análisis de rutina de sangre y fluidos corporales (incluyendo mediciones de gases en sangre y electrolitos), ultrasonografía, monitoreo de electrocardiograma, monitoreo de presión arterial, monitoreo de presión venosa central, oximetría de pulso, y compatibilidad cruzada para transfusiones de sangre.